Stefan Taschner, de Energetisch Berlin, y Christoph Grote, de Unser Netz- Unser Hamburg
Los monopolios que implican una red de acceso física (Agua, Gas, Electricidad, Teléfono...) necesitan una nueva vuelta de tuerca.
La "liberalización" (siempre entre comillas) del sector eléctrico Español en 1997, simplemente "liberalizó" la comercialización (quien vende al cliente) y la producción de energía (quien vuelca la energía a la red). Las otras 2 partes del mercado dejo el transporte (alta tensión) en manos de el monopolio semi-publico/semi-privado de Red Electrica y la distribución en manos de un monopolio territorial privado compuesto por las grandes de la patronal Unesa (Endesa, Iberdrola, Fenosa, EDP, E.On) en el que cada empresa ejerce el monopolio en su zona asignada.
Iniciativas como las cooperativas de consumo (SomEnergia, Goiener, ...) estan empezando a arrancar la comercialización de manos del oligopolio y permite a los usuarios escoger también, como cooperativistas de la comercializadora, a quien compran la producción. Pero el margen sobre el que actuamos como consumidores aún es muy estrecho. La mayor parte de los costes de la energía van a sufragar peajes monopolísticos que acaban, la mayoría, en los bolsillos de las empresas de Unesa. O el hecho de que los productores y comercializadores mayoritarios sean los mismos, hace que la subasta de energía que fija los precios sea una pantomima, como se ha hecho completamente evidente en los últimos días.
Las renovables permiten descentralizar la producción de energía. Si bién interconexión es útil para equilibrar producción y consumo, el transporte a grandes distancias conlleva pérdidas en la potencia transportada que se factura como parte de los peajes.
En Alemania, donde la reacción de los ciudadanos ha convertido a las cooperativas en la opción mayoritaria, ya se está planteando el siguiente paso: Remunicipalizar la red eléctrica de distribución. Podeis encontrar más detalles en este interesante artículo de la Vanguardia sobre el papel de los municipios alemanes en el cambio de modelo energético.
En resumen: cuando una red es un monopolio de distribución, a parte de usar los mecanismos que nos permita el mercado existente para minar el monopolio desde el minuto 0, también hay que empezar a pensar en crear un mercado paralelo. Se puede hacer creando redes de acceso paralelas o bien obteniendo la propiedad de las existentes. Se puede hacer mediante el municipio, mediante cooperativas de usuarios creadas para ello, o mediante licencias virales de interconexión. Pero hay que hacerlo.
